Leonardo Bastida
“No existen elementos para poner en duda la capacidad de las familias homoparentales para criar hijos y por eso no se les contempló dentro de la reforma”, señaló el diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD), David Razú Aznar, al final de la sesión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en la que se discutió la posibilidad de que las parejas de personas del mismo sexo puedan adoptar hijos.
Tras las acusaciones por parte del ministro Sergio Aguirre Anguiano en las que aseveró que la reforma al artículo 146 del Código Civil del DF no contempló este tema, Razú indicó que la reforma fue propuesta para modificar únicamente el concepto de matrimonio debido a que nunca hubo un argumento sustentable en contra de la adopción de menores por parte de parejas gay.
Por su parte, Leticia Bonifaz, consejera jurídica del Gobierno del Distrito Federal, dijo que esta argumentación en contra de la adopción por parte de Aguirre Anguiano es sólo “una estrategia” en contra de la medida ya que para el gobierno capitalino lo importante es que se beneficie a los niños. “Queremos muchos niños muy felices”.
A su vez, Lol Kin Castañeda, integrante de Acción Ciudadana y Construcción Nacional, indicó que ha habido un malentendido de la reforma al Código Civil del DF en la que se planteó una homologación de la figura del matrimonio y no una figura de excepciones.
Agregó que con esta discusión quedará aún más claro el porqué adoptar es un derecho constitucional que no debe negarse por alguna condición a priori.
En la sesión de la Corte también estuvo presente, Jorge Saavedra López, jefe de Asuntos Mundiales de la organización civil Aids Healthcare Foundation, advirtió que los ministros deben ser congruentes con lo que han aprobado hasta el momento y declarar como constitucional la adopción de menores por parte de parejas del mismo sexo.
La politóloga y feminista Adriana Ortiz-Ortega, calificó como “increíble” que la Corte haya separado en su discusión los temas de matrimonio y adopción. “En Argentina lo aceptaron como paquete. Esto es muestra del largo camino que nos falta para constituirnos como un país democrático”.
Entrevistada vía telefónica, Ortiz-Ortega apuntó que con el debate en la Suprema Corte, la institución del matrimonio se redefine y el concepto de familia se vuelve polisémico. “Lo que importa es el desarrollo pleno de las capacidades del individuo. Con esta reivindicación se está logrando una ganancia para la sociedad en su conjunto
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