Ciudad Juárez, “desierto de la hipocresía que no persigue la violación ni el feminicidio pero sí el aborto”

Llevan al ISSSTE a La muertita, obra de teatro sobre las asesinadas en la urbe fronteriza Christian Rea Tizcareño La actriz Dulce Chino en una escena de la obra. Foto: Christian Rea Tizcareño México DF, octubre 29 de 2010. El director y coautor de la puesta en escena La muertita, Mario Lage, expresó que Ciudad Juárez, Chihuahua, “es el desierto de la hipocresía que no persigue la violación ni el feminicidio pero sí el aborto”. La obra se presentó ayer en el Hospital Regional “Adolfo López Mateos”, del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). A la función acudieron médicos, enfermeras, camilleros, socorristas, empleados administrativos y de intendencia. Tercera llamada y el sótano ubicado en el estacionamiento del hospital se puso tan “helado como una tumba”. Se convirtió en una abandonada fábrica de textiles. “Hartas chamacas” cautivas, la más vieja de 25 años de edad, gritaron desesperadas: “Chente nos alquilaba con otros señores”; “hombres que pagaban para usarnos”; “la maquiladora no duerme”; “cada día se nos muere un cacho”; “¡me quiero ir de aquí!”… La obra muestra cómo las mujeres de Ciudad Juárez, y de cualquier parte del país, han sido discriminadas, violadas, aborrecidas, torturadas, explotadas y ejecutadas sistemáticamente por el machismo. Presentada el año pasado en el XVII Festival Nacional de Teatro Universitario, La muertita es un texto dramático inspirado en crímenes seriales reportados por la prensa, según señalaron sus autores. De principio a fin, la protagonista Lupe Vagabunda, víctima de la misoginia social, advierte: “¡váyanse acostumbrando a que ande yo por aquí!”, para ejercitar la memoria histórica en el espectador. Con lágrimas, la enfermera María Esther Andrade Martínez dijo al final de la función que “las mujeres a veces no sabemos cuánto valemos”. Su compañera Nelia Aguilar Vilchis calificó la obra como “impactante, es un tema muy difícil que me deja mucha reflexión”. Agregó la colega Rosa Elena Castro: “tenemos que ayudarnos a nosotras mismas, darnos la mano”. Mario Lage, profesor de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explicó que presentar La muertita en el ISSSTE significa retomar la idea de la década de 1960 de que la seguridad social incluye también el acceso a la cultura. La vejación contra las mujeres de Juárez no ha cesado. “Es peor aunque ya no esté tan teñida de amarillo. Esta realidad que retratamos no ha desaparecido, por desgracia. Simplemente está tapada por otra más escandalosa todavía”, opinó. Respecto a la estrategia y al discurso contra el narcotráfico del gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, el académico universitario refirió que “este sujeto habla nada más porque tiene un agujero en la cara”. Dulce Chino, coautora del texto dramático, criticó la erogación de la administración federal para los festejos del Bicentenario de la Independencia de México. “Gastas enormes cantidades de dinero en disfraces y pasarelas, de muy mal gusto por cierto. Es una burla. Prefieren emplear el dinero en banderitas y mandártelas a tu casa, en tanto que las madres de Juárez colocan fotografías de sus hijas en los postes”, contrastó. La también protagonista de la historia reconoció que “mucha gente nos ha bateado, porque nadie se quiere hacer cargo del tema, dicen que está ‘muy fuerte”. El fondo del problema radica en la indiferencia social. “No sé, no me importa, o sí sé pero no me interesa”, manifestó la egresada de la FFyL de la UNAM. En entrevista, Benigno Calixto Aniceto, secretario de Promoción Cultural de la Sección 39 del Sindicato Nacional del ISSSTE, se pronunció por “generar inquietud o interés” entre los trabajadores de la institución. El tema “es algo fuerte”, pero en el Hospital “Adolfo López Mateos” hay “apertura para expresarnos”. Información sobre presentaciones: escenaflotante@gmail.com y lageasecas@yahoo.com.mx