Prioritario atender VIH en cárceles, aseguran investigadores

80 por ciento de los internos con VIH con cargas virales detectables Mayor prevalencia de VIH al interior de penales que en exterior Leonardo Bastida Aguilar México DF, noviembre 16 de 2011. En el Sistema Penitenciario del Distrito Federal 80.4 por ciento de los internos con VIH/sida registran una carga viral detectable, lo cual significa que pueden transmitir el virus, explicó Juan Sierra Madero, Jefe de la Clínica de VIH del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, durante la presentación de resultados de estudios realizados en el Programa de Atención a Centros Penitenciarios de la Clínica Especializada Condesa (CEC). En el 5to Encuentro Universitario de VIH/sida, celebrado en la Academia Nacional de Medicina, el infectólogo mencionó que es necesario dar mejor y mayor atención a los internos seropositivos, pues, a diferencia de lo que se cree, un estado de salud deplorable por parte de los reclusos puede perjudicar la salud de la sociedad en general. Así, señaló que se han detectado fallas en los sistemas de salud al interior de los penales capitalinos, ya que se difunde poca información, hay poca motivación para atenderse, escasa relación médico-paciente, gran consumo de drogas, psicopatologías y desabasto de medicamentos. El integrante del Consorcio de Investigación sobre VIH/sida y Tuberculosis indicó que programas como el implementado por la CEC en el penal de Santa Martha Acatitla demuestran que sí se puede mejorar el estado de salud de los internos VIH positivos, ya que, a dos años de haberse implementado, ha logrado que 87.5 por ciento de los reos atendidos (203) tengan una carga viral indetectable. Señaló que estos resultados, fruto de dos años de trabajo, de febrero 2009 a agosto de 2011, están basados en la capacitación de médicos y enfermeras del penal, la formación de grupos de autoayuda, el abastecimiento de la farmacia, dar incentivos como una porción de alimento extra a los internos con mayor adherencia y la supervisión del consumo de medicamentos por parte de los integrantes del programa. Por su parte, Sergio Bautista Arredondo, investigador de la Unidad de Economía de la Salud del Instituto Nacional de Salud Pública, comentó que los estudios realizados al interior de los penales capitalinos tras la implementación de la campaña de detección “Ponte a Prueba”, llevada a cabo por la institución académica de su adscripción, mostraron que al interior de los centros de readaptación social hay una prevalencia de VIH de uno por ciento en mujeres y 0.9 por ciento en hombres, cuando la nacional es de 0.2 por ciento en el sexo femenino y 0.5 por ciento en varones. Ambos participantes en la mesa Salud Pública en Centros Penitenciarios del Distrito Federal consideraron que es necesario otorgarle a los centros de salud de los reclusorios un presupuesto similar al de los centros de salud especializados en VIH/sida a fin de reducir la carga viral de los internos, y así prevenir nuevas infecciones, tanto al interior como al exterior de los penales, ya que, coincidieron, es mínimo el número de internos que no son liberados para reincorporarse a la sociedad.