Viernes 2 de diciembre de 2011, p. 3
El estigma, la discriminación, la escasez de recursos y el limitado acceso a la información representan los principales obstáculos
para fortalecer las políticas públicas que buscan detener y reducir la propagación del VIH/sida, así como garantizar el acceso universal al tratamiento, señaló el Grupo Intergubernamental sobre Diversidad Sexual en México.
En un pronunciamiento firmado por las dependencias gubernamentales que conforman ese grupo, se aseguró que dichos obstáculos ponen en peligro de regresión los avances de México
en la respuesta a la pandemia.
En el documento –emitido por el Día Mundial de Lucha contra el Sida (o Día Mundial de la Respuesta ante el Sida)– se subrayó que los mexicanos continúan discriminando a seropositivos, pues de acuerdo con datos oficiales casi 36 por ciento no compartiría vivienda con alguien que padezca esa enfermedad.
Por lo anterior, el grupo –formado por los consejos nacionales para Prevenir la Discriminación y para la Prevención y el Control del VIH/Sida (Censida), la Comisión Nacional para Prevenir la Violencia contra la Mujer, el Instituto Nacional de las Mujeres, la Secretaría de Educación Pública, el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado– apremió a combatir el estigma, la discriminación, la misoginia, el machismo, la homofobia y la violencia sexual en el país.
“Las instituciones que integran el Grupo Intragubernamental de Diversidad Sexual en México consideramos que, para dar respuesta efectiva al VIH –que de acuerdo con el Programa conjunto de Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (Onusida) ha tocado a 34 millones de personas alrededor del mundo–, es urgente continuar y fortalecer las acciones encaminadas a combatir estigma, discriminación, misoginia, machismo, homofobia y violencia sexual, así como ampliar las acciones sobre salud sexual y prevención en la materia dirigidas a trabajadoras y trabajadores sexuales, migrantes, indígenas, personas con discapacidad, en reclusión y hacia usuarios de sustancias sicoactivas, ya que estos factores son determinantes para lograr cero infecciones y muertes por VIH en el país.”
Detener y reducir la propagación de esta enfermedad y el acceso universal al tratamiento para los enfermos son parte de los Objetivos de Desarrollo del Milenio que todos los estados integrantes de la ONU deben cumplir en 2015.
Los firmantes del pronunciamiento resaltaron que el estigma y la discriminación contra los seropositivos se reflejan en los resultados de la Encuesta Nacional sobre Discriminación en México 2010, la cual señala que 35.9 por ciento de las personas no estarían dispuestas a permitir que en su casa viviera una persona con VIH/sida.
Agregaron que el estudio muestra también que a menor escolaridad la percepción de igualdad y tolerancia disminuye: 40.1 por ciento de las personas entrevistadas que tienen estudios de primaria o menos dijeron que no vivirían con una persona con VIH, en tanto que se pronunció en el mismo sentido 7.7 por ciento de los que tienen nivel licenciatura o posgrado.
“En respuesta al virus, adoptamos el lema mundial de Onusida para este primero de diciembre, ‘Logremos el cero’, que busca cero nuevas infecciones por VIH, cero muertes por sida y cero estigma y discriminación, además de la modificación de la denominación de la efeméride, atendiendo a la recomendación y acuerdo de la comunidad internacional, de emplear un lenguaje que no esté ligado a contextos de violencia; por ello se designará a partir de este año como Día Mundial de la Respuesta ante el Sida.”
De acuerdo con datos de Censida, desde 1983 en México han sido notificados 149 mil 883 casos de VIH.
“Frente a estas cifras y ante la necesidad de ‘lograr el cero’ consideramos urgente homologar la legislación federal y estatal con lo establecido en instrumentos internacionales, ampliar y articular los recursos institucionales y las acciones de prevención en los distintos niveles y órdenes de gobierno, así como consolidar acciones coordinadas con la sociedad civil, a fin de que en México se garanticen plenamente los derechos y la dignidad de las personas que viven con VIH, a través de la educación, la información y el acceso a servicios de salud libres de estigmas y de discriminación”, expresaron las dependencias.