En las mesas de trabajo destacó el cabildeo de Bernardo Fernández del Castillo, coordinador de Asuntos Jurídicos de la Ssa, quien violó la normatividad insititucional, señaló Regina Tamés
Miércoles 7 de septiembre de 2011, p. 37
En 1978 nació en Inglaterra la primera niña por fertilización in vitro, Louise Brown, y desde entonces se han reportado más de 3 millones de nacimientos con ayuda de las técnicas de reproducción asistida, sobre las cuales en México no existe ninguna regulación, a pesar de que el tema se ha discutido durante las pasadas dos décadas.
La Comisión de Salud de la Cámara de Diputados decidirá este miércoles sobre un proyecto que a propuesta de la diputada del PRI, Cristina Díaz, plasma las ideas de los grupos conservadores del país. Aunque la exposición de motivos afirma que se tomaron en cuenta siete iniciativas presentadas desde 1999, omitió varios planteamientos, así como incorporar los que expuso la iniciativa llevada a San Lázaro por la senadora priísta María de los Ángeles Moreno.
Así lo informó Regina Tamés, directora del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), quien destacó que este último documento plantea la visión progresista del tema y, sobre todo, garantiza el respeto a los derechos de las personas interesadas en los procedimientos de reproducción asistida.
En entrevista, advirtió que son varios los cuestionamientos que se le pueden hacer al proyecto de dictamen ya elaborado en la Comisión de Salud, empezando porque afirma que embrión y ser humano son lo mismo. Por eso es entendible que prohíba la criopreservación de embriones; sin embargo, la ciencia ha demostrado de manera fehaciente que la vida empieza a partir de la semana 12 de gestación, nunca antes, apuntó.
Llamó la atención sobre el hecho de que en las mesas de trabajo convocadas por los legisladores tuvieron participación e incidencia integrantes de los grupos más conservadores de la sociedad, incluido Bernardo Fernández del Castillo, coordinador de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Salud (Ssa), quien con su trabajo de cabildeo incurrió en una violación a la normatividad institucional.
Además de limitar el número de embriones a obtener e implantar, el proyecto enviado a los integrantes de la comisión legislativa elimina cualquier posibilidad de realizar investigación científica con fines terapéuticos de células embrionarias, mientras en otros países se explora el beneficio de su uso para el tratamiento de enfermedades graves degenerativas e incurables en la actualidad.
El documento puntualiza, incluso, que tienen mejor viabilidad los esfuerzos de investigación con células troncales adultas.
El diputado del PRD, Heladio Verver, secretario de la Comisión de Salud, señaló que a pesar del trabajo realizado en los meses pasados, no hay acuerdo entre progresistas y conservadores, pero ambos coinciden en la necesidad de contar con una legislación sobre reproducción asistida.
Verver opinó que debieran tomarse en cuenta todos los puntos de vista, incluido el de la senadora Moreno, pero hay dificultades para que se dé un acercamiento de posiciones.
En la Comisión de Salud hay 29 diputados: 13 del PRI (44.8 por ciento), nueve del PAN (31 por ciento), y tres del PRD (10.3 por ciento). Los cuatro restantes son de los partidos Verde Ecologista de México, del Trabajo y Convergencia, y uno es independiente
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