Jóvenes y mayores de 50 años con inmunodeficiencia, reto para médicos
Ángeles Cruz Martínez
Periódico La Jornada
Sábado 30 de noviembre de 2013, p. 29
Sábado 30 de noviembre de 2013, p. 29
Cada año se diagnostican entre 950 y mil nuevos casos de sida entre jóvenes de 15 a 24 años –20 por ciento del total–, con lo que desde el inicio de la epidemia en México (1983) se han registrado 19 mil 500 casos. Este sector, junto con el de personas que viven con VIH/sida y tienen más de 50 años de edad, forman parte de los retos que plantea la epidemia a los médicos especialistas en el manejo de la enfermedad.
Desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Programa de Sida de Naciones Unidas (Onusida) se lanzó la alerta sobre la situación de estos sectores. En los primeros por el aumento en 50 por ciento de la mortalidad entre 2005 y 2007, y en los llamados
viejospor la aparición de complicaciones (afecciones cardiovasculares, renales, óseas) asociadas al virus y a los medicamentos.
Luis Enrique Soto, jefe del Departamento de Biología Molecular del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, explicó que a causa del VIH, las personas envejecen unos 10 años más rápido que el resto. Conforme aumenta la edad hay mayor
inflamaciónen el organismo, eso es normal, pero en presencia del VIH tal condición se acrecienta y se aceleran procesos de deterioro característicos de las enfermedades crónicas.
Por otra parte, algunos medicamentos antirretrovirales para el control de la infección, logran disminuir la carga viral incluso a niveles indetectables en sangre, pero en el largo plazo también ocasionan daño en órganos vitales como corazón, riñón y los huesos.
Los efectos adversos se presentan, de igual forma, en el sistema neurológico, indicó. Por eso la necesidad de que los médicos tratantes estén al pendiente de estos temas conforme sus pacientes van envejeciendo.
El experto puso de ejemplo a las mujeres, que a causa de la menopausia, alrededor de los 50 años de edad, presentan alteraciones hormonales que incrementan la posibilidad de desarrollar enfermedades de tipo cardiovascular y de pérdida de masa ósea. Este riesgo común en este grupo de edad aumenta en quienes viven con VIH/sida, indicó.
Onusida advierte en el informe 2013 sobre la situación de la epidemia que de 35.3 millones de personas portadoras del virus, alrededor de 3.6 millones tenían más de 50 años de edad en 2012.
En México, de acuerdo con estadísticas del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH/sida (Censida), de las 166 mil 370 personas registradas como casos de sida de 1983 al 30 de septiembre de 2013, 20 mil 26 rebasan la quinta década de vida, aunque no se puntualiza cuántos de ellos siguen vivos.
De cualquier manera, es un hecho que la alta eficacia de las terapias antirretrovirales contribuirá a que los individuos en este rango de edad seguirán aumentando, señaló Soto.
Por eso, en el tratamiento se debe considerar las condiciones de salud de los pacientes y seleccionar los fármacos que disminuyan o eviten los efectos adversos.
Respecto de los adolescentes y jóvenes menores de 24 años de edad, el investigador explicó que la mayor mortalidad está asociada con la falta de adherencia a los medicamentos y, en el caso de los menores de 19 años, porque se encuentran en una etapa de transiciones físicas y emocionales que los vuelve más propensos a tener prácticas sexuales de riesgo.
La OMS plantea en 2012 alrededor de 2.1 millones de portadores del virus tenían entre 10 y 19 años. De ahí la importancia del acompañamiento sicológico y emocional, afirmó Soto
No hay comentarios:
Publicar un comentario