Colonos de Juchitepec se enfrentan con la policía; se desconoce el número de heridos
Despliega la ASE cientos de agentes y dos helicópteros; logra rescatar a los cuatro acusados
Incendian edificio donde se refugiaron uniformados y detenidos
Arrolla joven a granaderos
Miércoles 11 de noviembre de 2009, p. 33
Juchitepec, Méx., 10 de noviembre. Cientos de pobladores que intentaron linchar y prender fuego a cuatro supuestos secuestradores se enfrentaron esta noche con la policía estatal. El saldo, tras siete horas, fue un número no determinado de agentes lesionados, dos por quemaduras.
Luego que los uniformados lograron rescatar a los presuntos plagiarios, hubo enfrentamientos esporádicos hasta las 11 de la noche entre unos 3 mil habitantes de la comunidad Cuijingo, municipio de Juchitepec, y alrededor de 800 granaderos de la Agencia de Seguridad Estatal (ASE).
La fuerza pública ingresó al poblado aproximadamente a las 21:40 horas y sacó a los presuntos delincuentes de una galera de la delegación municipal de Cuijingo, donde fueron encerrados para protegerlos de la turba, que prendió fuego al inmueble.
El incidente se inició la mañana de este martes, cuando el empresario gasero Trinidad Sánchez Rosas, de 56 años de edad, fue secuestrado por cinco sujetos en el municipio de Chalco. Los captores, quienes vestían ropa con insignias de la Policía Federal, lo llevaron a una casa de seguridad ubicada en la calle Zaragoza, en Cuijingo.
De acuerdo con la ASE, los plagiarios exigieron a María González Castillo, esposa de la víctima, 300 mil pesos en efectivo y la factura de un vehículo compacto. La policía intervino y a las 13 horas ubicó a los plagiarios en Cuijingo, donde 20 elementos de la ASE, apoyados por cuatro policías municipales, irrumpieron en una vivienda y rescataron a Trinidad Sánchez.
Fueron detenidos Óscar Hernández Sandoval, de 34 años de edad; José Luis López Gutiérrez, de 26; Antonio León Martínez, de 21; Gonzalo Galicia Delgado, de 24, y Ricardo Velásquez Escárcega, de 24. Este último se identificó como policía federal con un recibo de nómina deteriorado.
Cuando los agentes pretendían llevarse a los presuntos secuestradores, fueron interceptados por un grupo de pobladores que, a golpes, bajaron de una patrulla a los presuntos delincuentes y los llevaron a la plaza de Cuijingo. Los policías impidieron que los colonos se llevaran a Ricardo Velásquez Escárcega.
Una vez en la explanada de Cuijingo –en la región de los volcanes, a unos 50 kilómetros del Distrito Federal–, la gente colocó sogas en el cuello a los detenidos para lincharlos y les rociaron alcohol con la intención de prenderles fuego. La policía intervino y se llevó a los cuatro sujetos a una galera en la delegación municipal de Cuijingo, donde estuvieron varias horas.
A ese lugar arribaron funcionarios de Gobernación estatal, mandos de la ASE y el subprocurador de justicia para la región de Amecameca, Óscar Méndez Juárez, quienes negociaron la liberación de los acusados, pero la gente no aceptó las condiciones.
Para ese momento ya se habían concentrado en la plaza al menos 3 mil personas. Unas vigilaban a los supuestos secuestradores para impedir que los agentes se los llevaran, y otras bloquearon los accesos a la comunidad con tractores, piedras y llantas. Un grupo prendió fuego al vehículo compacto matrícula 867 PTX, que habría sido utilizado por los plagiarios.
Por la noche, autoridades estatales llevaron a la explanada a José Trinidad Sánchez González, hijo del secuestrado, quien pidió a la gente liberar a los retenidos, pero la gente se negó y pidió darles un escarmiento
.
La ASE envío a la zona más de 800 elementos del grupo de Fuerza de Acción y Reacción (FAR), provenientes de Toluca, Ecatepec, Nezahualcóyotl, Chalco e Ixtapaluca.
Rotas las pláticas, la ASE organizó un rescate con apoyo de dos helicópteros. La situación parecía fuera de control. A las 22:00 horas algunos pobladores arrojaban bombas molotov y otros objetos a la galera, resguardada por unos seis efectivos de la ASE. El inmueble se incendió y dos policías sufrieron quemaduras en piernas y brazos.
En ese momento, 300 elementos del grupo FAR irrumpieron en la explanada. Lanzaron gas lacrimógeno y rescataron a los presuntos secuestradores, así como a los policías que los custodiaban. Un joven atravesó la plaza a bordo de una camioneta de tres y media toneladas, y arremetió contra unos 40 granaderos. Algunos resultaron lesionados.
Fuentes no oficiales informaron que tres pobladores fueron detenidos y llevados a la subprocuraduría de Amecameca, al igual que los supuestos plagiarios. Los policías heridos fueron remitidos a hospitales de la región
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