Consigna PGJDF a dos atacantes de Malcolm

Consigna PGJDF a dos atacantes de Malcolm

Fueron detenidos el viernes pasado, tras asegurar el bar The Palace y tomar declaración a varios empleados

Violencia en antros, frecuente

Mirna Servín

 

Periódico La Jornada
Lunes 13 de mayo de 2013, p. 35

Tres días después del asesinato de Malcolm-Latif Shabazz, ocurrido en el bar The Palace, frente a la Plaza Garibaldi, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) consignó al Reclusorio Oriente a dos empleados del establecimiento mercantil como probables responsables de la muerte del joven.

De acuerdo con las investigaciones, al menos cinco personas golpearon al nieto del fallecido activista afroestadunidense Malcolm X al exigirle que pagara una cuenta de consumo por mil 200 dólares.

Policías de investigación buscan a otras tres personas, presuntamente involucradas en estos hechos.

Tras la golpiza, el joven fue ingresado en el Hospital Balbuena la madrugada del jueves, donde murió debido a múltiples traumatismos en la cara y en el cuerpo.

Tras el incidente, elementos de la policía de investigación aseguraron el lugar e interrogaron a los empleados durante el viernes, día en que fueron capturados dos de los agresores.

Sin embargo, la PGJDF no ha dado a conocer oficialmente los nombres de los acusados ni el pliego de consignación.

El común denominador

El incidente que derivó en la muerte de Malcolm-Latif Shabazz en el bar The Palace, en Garibaldi, es frecuente en varios antros de la zona, donde los asistentes son amenazados y golpeados en caso de no pagar los totales decuentas infladas, de acuerdo con visitantes, músicos y vecinos de la zona.

Un parroquiano cuenta que por el consumo de tres cervezas le pretendían cobrar 2 mil 800 pesos, y al negarse fue agredido y trasladado al Ministerio Público acusado de robo. Si ven que no traes tanto dinero, llaman una patrulla, pero si calculan que te pueden cobrar, generalmente te golpean hasta que accedes a cubrir el total, cuenta.

Paradójicamente, las autoridades no reciben denuncias de esos hechos, aseguró Luis Wertman Zaslav, presidente del Consejo Ciudadano del Distrito Federal, quien trabaja desde hace más de tres años en el programa Rescate de Garibaldi.

Imagen sin fecha –cortesía de la familia Shabazz, Xiomara Michel– de Malcolm-Latif Shabazz, nieto del activista político afroestadunidense Malcom X, cuando tenía 28 años de edad. El joven murió el jueves pasado a consecuencia de una golpiza por la disputa de una cuenta de consumo en un bar de la ciudad de MéxicoFoto Ap

Explicó que tanto autoridades de la policía y la procuraduría capitalinas, como de la Secretaría de Transportes y Vialidad y del Instituto de Verificación Administrativa se reúnen semanalmente en una mesa de trabajo para afrontar los problemas de la zona.

Garibaldi es un icono que representa a México como la plataforma del mariachi, y si hubiéramos recibido una sola denuncia al respecto, las autoridades habrían intervenido de inmediato, aseguró Wertman.

Sin embargo, la realidad pinta de manera distinta. De acuerdo con las personas entrevistadas, la práctica de tener gente muy peligrosa para cobrar las cuentas se reproduce en lugares como El Ántrax, y en los negocios con los números 23 y 27 de Eje Central Lázaro Cárdenas.

En estos dos últimos sólo abren algunas horas en la tarde y cierran. Ya hasta el nombre les quitaron para no ser identificados y funcionan por medio de los llamados jaladores.

De acuerdo con músicos del lugar, otros sitios donde se presentan estos problemas son El Rincón del Mariachi y La Cigarra. Imagínese qué tipo de personas usan para cobrar que son capaces de sacar a golpes a los propios soldados que visitan estos lugares; por eso a la gente le da miedo denunciar.

En la madrugada del 9 de mayo, el nieto del luchador social estadunidense Malcolm X, Malcolm-Latif Shabazz, de 29 años de edad, falleció tras ser golpeado en el bar The Palace, al negarse a pagar una cuenta inflada.

Hasta la tarde de ayer, el cuerpo del joven permanecía en el Instituto de Ciencias Forenses del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, en espera de la llegada de familiares que viajan de Estados Unidos para realizar el reconocimiento del cuerpo