Madres de niños asesinados devuelven a Granier dinero para costear sepelios
La PGJE de Tabasco confirma participación de los 5 detenidos;
venganza, el móvil, asegura
Familiares de los cuatro niños asesinados en el municipio de Tacotalpa, Tabasco, muestran ayer, camino a la Quinta Grijalva, residencia del gobernador Andrés Granier, los 80 mil pesos que en conjunto recibieron como apoyo para los funerales de los menoresFoto René Alberto López
René Alberto López
Corresponsal
Periódico La Jornada
Sábado 5 de mayo de 2012, p. 32
Sábado 5 de mayo de 2012, p. 32
Villahermosa, Tab., 4 de mayo. Unas 40 personas provenientes del municipio de Tacotalpa se apostaron este viernes frente a la Procuraduría General de Justicia (PGJ) del estado para exigir justicia y el esclarecimiento de los asesinatos de cuatro niños en el poblado Villa Luz.
Al mismo tiempo, las madres de las víctimas devolvieron en la Quinta Grijalva –residencia del gobernador Andrés Granier Melo– los 80 mil pesos que, según dijeron, les había entregado el mandatario estatal como apoyo para los funerales.
Teresa Álvarez Pérez y Anita Gómez Pérez, explicaron que les dieron 20 mil pesos como ayuda por cada menor, pero señalaron que no es con dinero como se va a esclarecer la muerte de los infantes, sino impartiendo justicia.
Indicaron que desconocen si los cinco detenidos, presentados por las autoridades el jueves, son los culpables de los crímenes de sus hijos.
Teresa y Anita, acompañadas de Teresa Jaber, procuradora social de organismos no gubernamentales, se reunieron este viernes con el procurador de justicia estatal, Gregorio Romero Tequextle, ante quien insistieron en su demanda de justicia.
Antes de llegar a la Quinta Grijalva, las mujeres exhibieron en las escalinatas de la PGJ el dinero en efectivo que les entregaron para costear el sepelio de Blanca Elena, Gustavo Adolfo y Jesús Alberto Gutiérrez Álvarez, así como de Samuel Vázquez Gómez.
Luego se dirigieron a la residencia oficial, donde fueron atendidas por el director de Gobierno, Leonardo García Hernández, quien trató de persuadirlas para que no devolvieran el apoyo económico, pero no lo logró.
En tanto, los familiares de los cinco detenidos como probables responsables de la muerte de los niños Agustín Pérez Hernández, de 27 años; Asunción Paz Cruz, de 18 años, y tres menores de entre 15 y 16 años, insistieron en la inocencia de sus parientes y acusaron atropellos en la indagatoria que realiza la Policía Ministerial.
Teresa Jaber señaló que aun cuando representa a los padres de los niños victimados, la organización no permitirá que se violenten los derechos humanos de los menores detenidos como presuntos responsables del crimen múltiple.
Por la noche, la PGJ confirmó la participación de los cinco detenidos y determinó que fue la venganza el móvil del homicidio múltiple, por lo que serán consignados ante un juez en las próximas horas bajo el cargo de homicidio calificado.
Uno de ellos, Paz Cruz, acusó a Pérez Hernández de haber asfixiados a los menores, cuyos cuerpos sepultaron en dos fosas clandestinas en el rancho Miel y Leche, en las inmediaciones del pueblo mágico de Tapijulapa, municipio de Tacotalpa.
Según la declaración de Pérez Hernández querían vengarse de Gustavo Gutiérrez Gómez –padre de tres de los cuatro menores– debido a que los acusó con el guardabosques de matar un puerco de monte. Esto molestó a Paz Cruz, quien aseguró que le iba
a meter una golpiza a don Gustavo por andar de sapo.
En rueda de prensa el procurador Gregorio Romero Tequextle detalló la confesión de Paz Cruz, quien afirmó que Pérez Hernández tenía problemas con Gustavo Gutiérrez porque no lo dejaba trabajar en el área de Villa Luz, y había dicho que
se las tenía que pagar como el quería.
Paz Cruz confesó que junto con los tres adolescentes participó sujetando a los niños porque Pérez Hernández amenazó a los cuatro con dañar a sus familias si no lo ayudaban a perpetrar el crimen múltiple
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