La peor parte de la sequía está por venir, advierten tres gobernadores

Algunos apoyos no avanzan al ritmo necesario: Herrera, de Durango">Deben agilizar los recursos del Fonden: Toranzo, de SLP">La ayuda federal, insuficiente: Duarte, de ChihuahuaUn indígena rarámuri muestra una laguna seca por la sequía en el territorio que habita en la comunidad Baqueachic, del municipio de Carichic, en el estado de Chihuahua">Foto Jesús VillasecaFernando Camacho ServínPeriódico La JornadaSábado 3 de marzo de 2012, p. 37Lo peor de la sequía “está por venir”, y para enfrentarla de manera adecuada es urgente que el gobierno se dé cuenta de que no puede seguir combatiendo una situación extraordinaria con recursos ordinarios, pues de lo contrario México enfrentará dentro de poco una situación todavía más catastrófica.Así lo advirtieron los gobernadores de Chihuahua, César Duarte; Durango, Jorge Herrera Caldera, y San Luis Potosí, Fernando Toranzo, durante la segunda reunión extraordinaria de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) para analizar las condiciones de sequía que afectan a prácticamente todo el país.El encuentro, al que asistieron representantes y funcionarios de 28 entidades, comenzó con un informe de las secretarías de Desarrollo Social y de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, donde se detallaron algunos de los estragos que ha provocado este fenómeno, como la pérdida o reconversión de más de 120 mil hectáreas de cultivos y la muerte de más de medio millón de cabezas de ganado.El titular de la Comisión Nacional del Agua, José Luis Luege Tamargo –quien llegó a la reunión con más de una hora de retraso–, advirtió que la reciente entrada de humedad en el Golfo de México generó condiciones menos adversas de calor en días recientes, pero no ha sido suficiente para provocar lluvias, por lo que advirtió que “lo más crítico está por venir”.De acuerdo con el funcionario, la dependencia a su cargo ha dedicado poco más de mil 523 millones de pesos para atender los efectos de la sequía –particularmente en las entidades más castigadas por ésta, que son Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Durango, San Luis Potosí y Zacatecas–, aunque dicha cifra podría llegar hasta 3 mil 511 millones.Luege afirmó que en unos cuantos días le hará llegar a los gobernadores un estudio en el que se proyecta cuáles serán las regiones más afectadas en el periodo crítico de marzo, abril y mayo, y subrayó que ninguna persona padecerá falta de agua o alimentos.El mandatario de Durango, por su parte, agradeció el interés del gobierno federal por atender a los estados que han pasado ya hasta 18 meses sin tener lluvias, pero igualmente subrayó que algunos programas de apoyo no están avanzando al ritmo que se necesita, ni se están entregando los recursos suficientes en todos los municipios que enfrentan condiciones de emergencia, en particular los del Fondo de Desastres Naturales (Fonden).“Lo peor está por venir. Las temperaturas que se esperan para abril en Durango son superiores a 40 grados, y para mayo están cerca de 50. Por eso no queremos que nos gane la inmovilidad del burocratismo”, advirtió Herrera.De su lado, Toranzo coincidió en señalar que en los próximos meses ocurrirán los peores daños por la falta de precipitaciones, y urgió al gobierno federal a agilizar los recursos del Fonden para todos los municipios potosinos afectados. “Nos faltan siete meses de sequía y podríamos estar en el preámbulo de una tragedia”.La misma falta de celeridad para entregar la ayuda se está viviendo en Chihuahua, señaló el gobernador de esa entidad, César Duarte, quien lamentó que después de dos heladas y dos sequías consecutivas aún no hayan recibido apoyo federal suficiente. “No podemos enfrentar una situación extraordinaria con recursos ordinarios. Tenemos que impulsar acciones con talento para preservar la paz social” y evitar una migración masiva a las ciudades, enfatizó.La reunión terminó con un llamado al gobierno federal para que diseñe una estrategia de largo plazo mediante la cual atienda los efectos de la sequía, y otorgue cuanto antes recursos adicionales para ello y no sólo los que ya forman parte de diversos programas regulares de apoyo al campo