Tras el desbordamiento del río Cuautitlán, les prometieron terrenos y pies de casa, aseguran
Lunes 19 de diciembre de 2011, p. 32
Teoloyucan, Méx., 18 de diciembre. Maletas de ropa apiladas en butacas y colchonetas sobre el escenario de la casa de cultura municipal son parte de la vivienda provisional de siete familias que desde el 3 de septiembre esperan que el gobierno del estado de México y la alcaldía las reubiquen, luego que una fractura del río Cuautitlán inundó cientos de casas de este municipio y Cuautitlán.
Durante la contingencia, el candidato presidencial priísta Enrique Peña Nieto, entonces gobernador, y los alcaldes Francisco Fernández Clamond, de Cuautitlán, y Gerardo Liceaga, de Teoloyucan, ordenaron instalar albergues y prometieron ayuda extraordinaria para los damnificados, cuyas viviendas estuvieron anegadas de aguas negras más de una semana.
La Comisión Nacional del Agua ordenó la demolición de casas edificadas a contramuro del río Cuautitlán, pues los predios se utilizarían para reparar los 40 metros del drenaje que se fracturó cerca del poblado de San José Puente Grande. Las aguas pestilentes del lago de Guadalupe cubrieron más de 150 hectáreas de zonas urbanas y rurales.
Ese día sacamos cargando a nuestro padre. Es diabético y necesita diálisis. Mí mamá tiene 70 años y temíamos por su vida
, recordó Patricia Cruz. Con sus hermanos junta mil 300 pesos cada mes para pagar la renta de la casa donde se alojaron sus padres.
El 16 de septiembre, cuando apenas había rendido protesta como gobernador, Eruviel Ávila visitó a damnificados de Cuautitlán y Teoloyucan y les prometió ayuda total
. A mediados de noviembre el apoyo alimentario les fue cancelada.
Cuando nos desalojaron nos dijeron que nos iban a dar un terreno y un pie de casa, pero ya pasaron tres meses y seguimos aquí
, comentó Patricia Cruz Pérez, cuya familia habitó por más de 50 años predios contiguos al río, cuyo cauce se fracturó e inundó más de mil 400 casas en los dos municipios.
Los afectados insisten en que el alcalde de Teoloyucan, Gerardo Liceaga, prometió casas y terrenos de 200 metros para cada una de las 16 familias damnificadas. El Instituto Mexiquense de la Vivienda Social liberó seis lotes de 200 metros cada uno y dispuso de material para sólo ocho pies de casa. Los predios se ubican en Cuautitlán y no tienen servicios de agua, electricidad ni drenaje.
A finales de noviembre empleados del municipio informaron a los damnificados que comenzarían a recibir grava, arena y varillas, entre otros materiales para construir pies de casa de 28 metros cuadrados. Así esta el proyecto
, comentan los afectados, quienes apenas tienen dinero para comer, pues algunos perdieron el empleo.
El auditorio de la casa de la cultura es albergue de al menos 10 adultos y 20 menores que duermen en el escenario, se bañan a jicarazos en sanitarios públicos y piden permiso al personal del recinto para que los dejen cocinar en una parrilla.
Al principio recibían tres comidas, leche, pan y cereal para los niños, catres, cobijas, calzado y ropa. Pero al transcurrir el tiempo el apoyo se diluyó.
Horacio Reséndiz Cruz y su esposa María de los Ángeles Cruz Pérez, y sus hijos de 13, nueve y siete años de edad, ven pasar los días en el auditorio. Es muy difícil estar aquí. No tenemos libertades, los niños no pueden jugar, podemos bañarnos sólo por las noches
, dice.
Todavía tengo gente en el albergue, pero ya les dimos un terreno de 200 metros a cada familia para reubicarlas en Cuautitlán
, comentó Gerardo Liceaga, alcalde priísta de Teoloyucan.
Dijo que no ayudará en la construcción de los pies de casa porque el convenio no lo estipula. Además, las familias no eran propietarias de los predios donde tenían sus casas porque era franja federal, agregó.
“Ya les dije que hasta este mes estarán en el albergue. Soy el único que tiene (albergados). Cuautitlán ya les dijo a todos bye y yo digo, con todo respeto: no tenían terreno, les das terrenos de 200 metros; no tenían materiales para construir, les consigo los pies de casa. O sea, les dimos todo
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