El presidente Felipe Calderón aseguró que es una irresponsabilidad
que un país como Canadá hayan abandonado el Protocolo de Kyoto, acuerdo internacional que promueve acciones contra el cambio climático mediante la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, pues se trata de un modelo de civilización para el futuro.
Al recibir el premio de Ecología y Medio Ambiente 2011 que entrega la Fundación Miguel Alemán Valdés, destacó los beneficios de promover un crecimiento económico amigable con el entorno natural. Hacemos que el crecimiento económico sea compatible con el medio ambiente, o no habrá desarrollo para nadie.
Incluso, aseguró que sin crecimiento sustentable, lo que hoy es efímera ganancia de corto plazo, se volverá miseria y problemas de dimensiones extraordinarias para un país.
En la ceremonia de entrega del premio, realizada en la residencia oficial de Los Pinos, el presidente Calderón dijo que nuestra civilización, si algún riesgo corre es la extinción de la misma por el acelere en el cambio climático, más allá del riesgo nuclear, que todavía existe y habría que estar atento de él
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En una larga intervención, donde hizo un rápido recuento de los programas de su gobierno en la materia, confesó a los presentes su preocupación fundamental por el medio ambiente. Y yo digo, en broma, que si no hubiera sido Presidente de la República, me hubiera gustado ser, lo crean o no, un secretario de medio ambiente
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Aseguró, que la perseverancia para lograr el cuidado del entorno y los recursos naturales sólo se logra con la fusión entre ciudadanía, iniciativa privada y los gobiernos.
Por su parte, Miguel Alemán Velasco, presidente del Patronato de la Fundación Miguel Alemán Valdés, dijo que México ha alcanzado en esta materia un liderazgo importante a nivel mundial, caso contrario a Estados Unidos y China, que son las potencias que más contaminan.
Desatacó que la preservación de los recursos naturales, preocupación que ha tenido el gobierno federal, ha alcanzado a estados y legislaciones locales.
Recordó que desde tiempo inmemorial, existen en México tradiciones indígenas que demuestran el interés de nuestros antepasados por cuidar y preservar el entorno natural en que vivieron, pero, a pesar de ello, se ha abusado de la explotación de nuestros recursos naturales y de sus capacidades de regeneración.
Nos ha faltado tanto a individuos como a sociedad medir las consecuencias de estas acciones nuestras, de depredación, utilización irresponsable de la naturaleza, concluyó
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