El Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan recibió ayer, en Berlín, en manos de su director el antropólogo Abel Barrera, el sexto Premio de Derechos Humanos de Amnistía Internacional (AI), como reconocimiento a su trabajo en defensa de las garantías individuales, particularmente sobre la investigación de desapariciones forzadas cometidas por el Ejército.
La ceremonia, realizada en la Casa de las Culturas del Mundo, contó con la participación del presidente alemán, Christian Wulff, y el secretario general de AI, Salil Shetty, quienes manifestaron su preocupación por el estado de los derechos humanos en México.
En entrevista telefónica desde la capital alemana, Barrera explicó que, en su mensaje de agradecimiento, hizo una mención especial al caso de las indígenas Inés Fernández y Valentina Rosendo, cuya agresión sexual a manos de soldados, en 2002, motivó una sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en contra del Estado mexicano, sin que éste haya cumplido aún con dicha resolución.
Demandamos que el caso de Inés y Valentina sea turnado al fuero civil en vez de al militar, y advertimos sobre la situación de violencia en México y la falta de atención a las exigencias de la sociedad. También pedimos que se respetaran los derechos humanos, como el de la vida y la seguridad, y que se castigue a los responsables de esta guerra
, afirmó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario